Una línea es una sucesión continua de puntos, en investigación científica cada uno de esos puntos corresponde a un estudio. Por lo tanto, podemos decir que “el propósito del estudio” es un punto concreto dentro de la línea de investigación que, da origen al desarrollo de un estudio; el propósito del estudio es el punto de partida para poder iniciar un trabajo de investigación.
Algunos autores utilizan el nombre de especificidad del estudio, para referirse al propósito del estudio, porque se trata de un hecho o aspecto específico que se desea conocer o mejorar, es el deseo del investigador, que se expresa gramaticalmente en el título del trabajo de investigación.
Las ideas generan intenciones y las intenciones se expresan como propósitos, por lo tanto, el propósito del estudio es la expresión gramatical de la idea de investigación, así que habrán tantas formas de expresar el propósito como ideas de investigación se nos ocurran.
Algunos autores denominan al propósito del estudio como la intención analítica, porque expresa las intenciones de prueba de hipótesis y estimación puntual, sin embargo, este concepto solo aplicaría a los estudios inferenciales, dejando de lado a los estudios de nivel exploratorio y a algunos estudios de nivel descriptivo, que solo pretenden describir o caracterizar.
También existen los autores que consideran al propósito del estudio como una finalidad cognoscitiva, porque expresa el deseo de conocer por parte del investigador, sin embargo el conocimiento es la finalidad únicamente de la investigación pura o básica, mientras que la investigación aplicada tiene como finalidad la mejora del ser humano y su entorno.
Por otro lado, también hay quienes denominan al propósito del estudio como objetivo del estudio. En el siguiente ejemplo: Comparación del rendimiento académico de dos instituciones educativas, el objetivo es comparar, y por derivación nominal el propósito del estudio es la comparación; por ser un sustantivo abstracto que corresponde a una idea.
En el ejemplo anterior, el investigador parte de una idea, lo cual genera una intención, que se expresa en el propósito del estudio “comparación” y descubrimos que tras este sustantivo abstracto, se esconde el objetivo – comparar – de manera que el objetivo del estudio, es la traducción operativa del propósito del estudio, porque descubre la acción que lo puede completar.
El propósito del estudio al ser único se traduce en un solo objetivo, al cual denominaremos objetivo específico, porque se trata de un hecho concreto o aspecto específico que se desea conocer o mejorar, de manera que sí existe la necesidad de plantear más objetivos en el estudio, estos objetivos corresponderían a pasos intermedios o complementarios.
De manera que podemos adelantar una breve taxonomía de los objetivos del estudio: Tenemos al objetivo específico (derivado del propósito del estudio) y a los objetivos operacionales (correspondientes a los pasos intermedios o complementarios). Hablando de taxonomía, otra forma de nombrarlos serían: objetivo principal y objetivos secundarios.
Si bien el propósito del estudio parte de una idea del propio investigador, no todo propósito debe desarrollarse, antes de ello debe considerarse “el estado del arte”, entendiendo al estado del arte, como el estado actual del conocimiento sobre una línea de investigación, es el estado del arte quien nos indica si existe o no un vacío del conocimiento que se debe cubrir.
El propósito del estudio expresa la necesidad de completar un vacío de conocimiento dentro de una línea de investigación, es el deseo del investigador de descubrir algo que todavía no se conoce; este propósito aparece expresamente en el enunciado del estudio y es la génesis de toda estrategia metodológica y estadística para completar un estudio.
Para saber en qué punto de la línea de investigación desarrollar el estudio, habrá que realizar una búsqueda exhaustiva de la información. Es aquí donde aparecen los antecedentes investigativos, mientras más se avanza en el desarrollo de una línea de investigación, se requiere mayor número de antecedentes investigativos.
Por ejemplo, si ya se conocen las causas de la diabetes, entonces convendrá realizar un estudio de factores pronósticos; pero si ya, se conocen estas complicaciones, hagamos un estudio de tratamiento. La elección no depende del investigador, sino de lo que se conoce, hasta el momento en que se plantea el propósito del estudio.
Si para un determinado propósito aún no existen antecedentes investigativos, tal vez conviene retroceder un poco en el camino y desarrollar un estudio que cubra ese vacío de conocimiento que se está detectando, ello dará mayor sustento y fortaleza a la línea de investigación, que se está desarrollando.
El propósito determina el nivel investigativo
Imaginemos una línea vertical, la denominaremos línea de investigación, ahora ubiquemos un punto en esa línea, a partir de ese punto tracemos una línea horizontal, a esta nueva línea denominaremos nivel investigativo; el punto donde se cortan estas dos rectas corresponde al propósito del estudio.
En el ejemplo: “Influencia del clima organizacional sobre la calidad de la atención percibida por los usuarios”. El término ‘influencia’ hace alusión a una relación causa-efecto. Un mejor clima organizacional, se traducirá en una mejor percepción de la calidad de la atención, este planteamiento corresponde al nivel investigativo explicativo.
La influencia como propósito del estudio aparece en numerosos enunciados. Por ejemplo: “Influencia de la diabetes en el deterioro cognitivo”, “Influencia de la actividad física sobre la calidad de vida”, “Influencia de la dinámica familiar en el fracaso escolar”. ‘Influencia’ significa que una variable estuvo presente antes que la otra.
En el estudio de influencia existe una relación temporal entre las variables analizadas, se trata del tercer criterio de causalidad, después de la asociación estadística y la fuerza de asociación; para plantear una relación causal entre dos variables, esta es la condición que permite situar al estudio de influencia en el nivel investigativo explicativo.
Un estudio de influencia es un estudio observacional, porque no podemos dejar de dar tratamiento a los diabéticos, solo para ver si presentan o no deterioro cognitivo. El estudio de influencia es un estudio de causa y efecto observacional, corresponde al primer estudio que debemos desarrollar en el nivel investigativo explicativo.
El propósito se deriva en el objetivo del estudio
Por Ejemplo: “Comparación del rendimiento académico entre dos salones de clases”. Aquí la intención del investigador es saber si el rendimiento académico es igual o distinto en los dos salones de clases; en este ejemplo el objetivo específico comparar está expresado como sustantivo en el propósito del estudio.
‘Comparar’ es el objetivo investigativo usado con mayor frecuencia en investigación científica, se puede comparar a cualquier nivel investigativo, desde el exploratorio al aplicativo; y se puede desarrollar con diferentes diseños de investigación; por ello, el objetivo comparar, cobra sentido solamente si representa al propósito del estudio.
En muchos casos, el objetivo comparar va acompañado por una medida estadística de la población, como en el siguiente ejemplo: Comparación de la incidencia de diabetes mellitus en dos áreas de salud; la incidencia corresponde al nivel descriptivo, pero la comparación lo convierte en un estudio analítico y lo eleva al nivel relacional de la investigación.
Comparación del efecto de dos fármacos antihipertensivos, ambos sirven para reducir los niveles de la presión arterial, aquí la comparación va acompañada de la palabra clave: efecto, lo cual nos indica que el estudio corresponde al nivel investigativo explicativo, el término comparación es parte del propósito del estudio.
En el siguiente ejemplo: “Comparación de dos tratamientos para el cáncer de mama”; la comparación va acompañada por una palabra clave: tratamiento, lo cual localiza al estudio en el nivel investigativo aplicativo. En conclusión, el objetivo comparativo aparece frecuentemente en el enunciado como propósito del estudio.
El propósito sugiere el diseño del estudio
En el ejemplo: Incidencia de enfermedades diarreicas en los meses de verano; el término ‘incidencia’ hace alusión al diseño del estudio. Incidencia significa que el estudio es observacional, prospectivo, longitudinal y descriptivo. En este ejemplo la incidencia es el propósito del estudio.
Cuando un investigador comunica que su intención es conocer la incidencia de las enfermedades diarreicas, se refiere a un hecho concreto y puntual, y responde a la pregunta: ¿Con qué velocidad aparecen nuevos casos de diarrea en los meses de verano? Evidentemente el responder esta pregunta, no solucionará el problema de la diarrea.
Sin embargo, es un punto de partida para priorizar problemas de salud en la población, si la incidencia de las diarreas es tan alta como para ser considerada un problema de salud pública, habrá que priorizar su control; es posible que existan problemas más graves en la población y no amerite priorizar las diarreas, solo lo sabremos si hacemos un estudio de incidencia.
De manera que el estudio en sí, no solucionará el problema de las diarreas en los meses de verano, pero si suministra información para un manejo coherente de los recursos. Puede parecer insignificante conocer la velocidad con la que surgen casos nuevos de diarrea, pero es importante desde el punto de vista de la solución de problemas con enfoque científico.
Así, el propósito del estudio analizado en este ejemplo, es precisamente el diseño de la investigación. En otros casos, el propósito del estudio puede sugerir el desarrollo de la estrategia metodológica y estadística para completar el estudio en mayor o menor medida, por ello estar atento al propósito del estudio que sugiere el diseño de la investigación.
El propósito sugiere la prueba estadística.
En el ejemplo: Correlaciónentre los niveles de hemoglobina de la madre y el peso de su recién nacido. La hemoglobina de la madre es una variable numérica y el peso de su recién nacido también lo es, lo que haremos desde el punto de vista analítico es una correlación, y esto se está expresando ya en el enunciado.
Pero al igual que sucede con – el propósito del estudio que se deriva en el objetivo – esto no significa que siempre será así, la prueba estadística puede aparecer en el enunciado del estudio, y representar al propósito del estudio; pero no todas las pruebas estadísticas son capaces de representar al propósito del estudio, por ejemplo la regresión logística binaria.
Lo que sucede con la regresión logística binaria, que es un procedimiento estadístico, puede ser utilizado tanto en estudios relacionales, explicativos y predictivos, pero no ayuda a establecer ni siquiera el nivel investigativo, menos el propósito del estudio, de hecho la mayoría de las pruebas estadísticas no son factibles de utilizar como propósito del estudio.
Dependiendo del campo del conocimiento, esto puede variar, por ejemplo: Aplicación del modelo de regresión logística en la predicción del rendimiento académico; este es un tema de investigación para un matemático, pero nunca para un licenciado en educación, a este último le interesa predecir y mejorar el rendimiento académico con regresión logística o sin ella.
En todos los casos, el propósito del estudio es el punto de partida para pensar en los procedimientos estadísticos a realizar, por supuesto ello pasa por plantear unos objetivos estadísticos, que señalaran un acercamiento más preciso al análisis estadístico, finalmente hay más de un procedimiento estadístico para alcanzar el mismo propósito.
El propósito puede representar la técnica estadística
Por ejemplo: Análisis de supervivencia de los pacientes con cáncer de estómago sometidos a tratamiento con quimioterapia. El análisis de supervivencia no es una prueba estadística, sino una técnica que nos ayuda a conocer el pronóstico de la enfermedad.
El análisis de supervivencia es una técnica muy apropiada cuando lo que estamos investigando es “el tiempo hasta que algo ocurre”. Requiere como mínimo dos variables: el tiempo y la ocurrencia o no del evento terminal; de manera que, lo que se calcula es precisamente el tiempo medio, se trata de una estimación puntual.
El propósito del estudio, como hecho específico de lo que buscamos conocer o mejorar, no necesariamente es una sola palabra, en muchos casos es una frase, y en otros casos tendrá que ser entendido en el contexto del enunciado del estudio, a partir de ello, podemos aventurarnos a imaginar todo el método investigativo.
Otro ejemplo sería: Análisis factorial para evaluar la validez de constructo del examen de admisión. En este ejemplo, la técnica estadística es el análisis factorial, porque está compuesto por un conjunto de procedimientos, pero va acompañado de la intencionalidad, que es evaluar la validez de constructo, con lo cual se enfoca mejor el enunciado del estudio.
Finalmente el propósito del estudio, puede explicitar la técnica estadística, y ello delimita bien la intencionalidad del investigador, por lo que aparece en el enunciado del estudio, es una alternativa para cuando se quiere hacer un énfasis de los procedimientos estadísticos que se van a aplicar mucho más cuando hacen referencia al diseño de la investigación misma.
El propósito del estudio por sí mismo
En el ejemplo: “Factores de riesgo para la hipertensión arterial”. El propósito no es solamente calcular la probabilidad de enfermar de hipertensión, sino que al asociarse con la palabra ‘factores’, delimita mejor al propósito del estudio que será: conocer las condiciones que incrementan la probabilidad de enfermar de hipertensión.
Esto quiere decir que podemos utilizar cualquier palabra o frase para expresar la intención del investigador, que si bien puede corresponder al nivel investigativo, al objetivo del estudio, a la prueba estadística, a la técnica estadística, cualquier estrategia será válida, mientras exprese el deseo del investigador.
Son ejemplos de propósitos en el nivel exploratorio: identificación, definición, interpretación, determinación. En el nivel descriptivo: caracterización, incidencia, prevalencia, frecuencia, estimación, descripción, verificación. En el nivel relacional: factores de riesgo, factores relacionados, factores asociados, asociación, correlación, relación.
En el nivel explicativo: causas, determinantes, desencadenantes, influencia, demostración, comprobación, evidenciación, efecto. En el nivel predictivo: complicaciones, consecuencias, pronóstico, predicción, prevención. En el nivel aplicativo: supervisión, tratamiento, intervención educativa, evaluación, control, calibración, monitoreo, eficacia, eficiencia.
Una línea de investigación puede entenderse como una cadena, donde cada uno de sus eslabones corresponden a un estudio que se diferencian entre sí por su propósito; este propósito debe expresarse de la forma más clara posible, incluso es posible utilizar terminología técnica de la profesión o especialidad donde se desarrolla.